Redacción: Erika Pedroza

Traducción al español: Dinorah Peña-Durán

Nunca es demasiado tarde. Si no, preguntémosle a Lindsay Mendoza.

La vida y otras responsabilidades la llevaron por un camino diferente en su último año de preparatoria. Pero esta joven de 30 años no se rindió jamás. El mes pasado obtuvo su diploma de la escuela preparatoria, 12 años después de su fecha de graduación proyectada. Lindsay recibió el codiciado certificado el pasado jueves durante una ceremonia de graduación especial en el Centro de Preparación de Carreras Cardwell.

“Lindsay es un claro ejemplo de que el aprendizaje es un viaje para toda la vida, en el que aprendemos de nuestras experiencias, aprendemos de los demás, aprendemos de nuestro entorno, y seguimos adelante, dice Christopher Johnson, consejero principal de Cardwell. “Obtener su diploma de preparatoria conduce a mayores oportunidades financieras, pero el valor, determinación y actitud de ‘nunca rendirse’ son lo que nos hace exitosos en la vida. El ejemplo de Lindsay es de lo que se trata Cardwell; generar esperanza, celebrar el éxito logrado y producir personas que quieran seguir aprendiendo toda su vida.”

Después de ser retenida en su último año en un distrito escolar vecino, Mendoza se trasladó a Cardwell en el otoño de 2009 para repetirlo.

“Ese año, me mudé con mi entonces novio, ahora prometido, y estaba esperando a mi hijo mayor”, dice.

En el tiempo que asistió a Cardwell, Lindsay completó todos los cursos requeridos y aprobó todas las partes del examen estandarizado estatal necesario para graduarse, luego el TAKS, excepto la parte de biología.

“Era lo único que me detenía”, dice. “Luego tuve a mi hija, y una vez que tuve a mi hija, fue difícil para mí volver a la escuela. Mi enfoque se convirtió en mi hija y nunca volví a intentar terminar “.

Hace siete años, intentó retomar el examen TAKS, pero se topó con un par de obstáculos logísticamente hablando

“Simplemente lo dejé pasar de nuevo”, dice. “Pero seguía pensando, estoy tan cerca de lograrlo. Solo necesito aprobar el examen de biología. Yo puedo hacerlo.'”

Así que llamó a la escuela Cardwell de nuevo. Esta vez, estaba conectada con el Señor Johnson. Él le explicó cómo la prueba TAKS había sido eliminada gradualmente, por lo que tomaría el examen estandarizado estatal de fin de curso (EOC) STAAR del Estado de Texas y la ayudaría a prepararse.

“Me ha ayudado mucho”, dice Lindsay. “Él me ayudó a conseguir el examen programado y sólo se aseguró de que no me diera por vencida.”

Durante un mes, ella se concentró en estudiar- ver videos de YouTube y revisar una prueba simulada que su prometido, Amador Soto, imprimió para ella. Tomó el examen a principios de diciembre, y un mes después, recibió la noticia de que lo había aprobado.

“Estoy feliz de haberlo hecho finalmente”, dice. “Hice esto por mis hijos. Si no fuera por ellos, no creo que hubiera tenido la motivación. Ellos me motivaron a seguirlo intentando.”

Lo que había sido su enfoque, se convirtió en su motivación – sus hijas: Mia Soto, 11; Camila Soto, 7; y Audriana Soto, 6. Ahora con su diploma de preparatoria en la mano, Lindsay planea inscribirse en la escuela de cosmetología, en gran parte para contribuir a crear un futuro mejor para su familia.

“Este logro ha abierto todo tipo de oportunidades”, dice. “Estoy muy emocionada por el futuro.”