Redacción: AndreAnna Tate
Traducción al español: Dinorah Peña-Durán
Para Jayden Alonzo, estudiante de último año de preparatoria, la escuela ha sido mucho más que una experiencia académica: ha sido un lugar donde ha descubierto lo que le apasiona, ha creado recuerdos para toda la vida y ha honrado a su mayor apoyo, su madre. Jayden ha pasado toda su carrera académica en el Distrito Escolar Independiente de Irving, asistiendo a las escuelas primarias Good y la secundaria Austin antes de comenzar su etapa en la preparatoria Irving. Durante los últimos cuatro años, Jayden Alonzo ha destacado en el salón de clases, en el campo de fútbol americano y en la lona de lucha libre como un estudiante y atleta ejemplar. Muchos de sus recuerdos más preciados son de cuando practicaba deportes.
«Crecí jugando al fútbol, pero no era lo suficientemente físico para mí», dice. «Así que decidí empezar a jugar al fútbol americano en la secundaria».
Jayden pasó a jugar al fútbol americano varsity en la Preparatoria Irving como linebacker y ha sido miembro del equipo de lucha libre durante los últimos tres años. Dice que su experiencia más memorable en la preparatoria fue competir en el torneo de lucha libre del distrito celebrado este año en Coppell. No solo fue una experiencia emocionante, sino que la mayoría del equipo se clasificó para las regionales, algo inédito para muchos de los estudiantes. Durante todo este tiempo, una persona ha estado siempre a su lado para animarlo – su mamá.
«Siempre ha estado ahí para mí», dice Jayden. «Siempre decoraba mi locker y me daba canastas con regalos especiales cada día de partido. Recuerdo que me llevaba a todos mis partidos de fútbol cuando era pequeño, sin importar lo lejos que estuvieran. Mi madre siempre se aseguró de que practicara deporte y me apoyó sin importar lo que pasara».
Para él, su apoyo fue decisivo.
En el aula, Jayden se sintió atraído por la clase de Medicina Forense, y mencionó que sus lecciones favoritas eran las que trataban sobre salpicaduras de sangre y laboratorios de ADN, ya que le permitían adquirir experiencia práctica. Al reflexionar sobre su etapa en la Preparatoria Irving, Jayden afirma que la lección más importante que ha aprendido es sencilla, pero poderosa.
«Todo es difícil en la vida, pero pase lo que pase, hay que seguir adelante», afirma.
El martes 3 de junio, Alonzo y sus compañeros de los Irving Tigers cruzarán el escenario del Estadio Joy y Ralph Ellis, pasando de ser estudiantes a graduados. Tiene previsto continuar sus estudios en el Dallas College para especializarse en Administración de Empresas, con la esperanza de trasladarse a la Universidad del Norte de Texas o a la Universidad de Texas en Arlington para obtener su licenciatura. El objetivo a largo plazo de Jayden Alonzo es seguir haciendo crecer el negocio de automóviles de su familia junto a su padre.