Redacción: Erika Pedroza

Traducción al español: Dinorah Peña-Durán

Un espejo cuelga de una de las paredes del salón de clases de Prisma Penzo. Las palabras “Yo soy” delinean la parte superior. A medida que los estudiantes ven su reflejo, se les indica que completen la declaración con una afirmación positiva. Palabras como “Yo soy inteligente”, “Yo soy responsable” y “Yo soy hermosa” suenan en todo el aula.

Esta actividad es una de las muchas que utilizan los 38 puestos de ‘Empleados Motivadores’ estudiantiles del distrito, como Prisma, que trabaja en la Escuela Primaria Brown, para ayudar a los estudiantes a procesar sus sentimientos. Financiado por fondos federales de Ayuda de Emergencia para Escuelas Primarias y Secundarias (ESSER), los puestos de motivadores estudiantiles se crearon para abordar el impacto continuo de la pandemia COVID-19 y el trauma social y emocional que los estudiantes pueden haber enfrentado durante la pandemia.

Como embajadores del aprendizaje socioemocional, los motivadores estudiantiles brindan los recursos necesarios y apropiados a los estudiantes, escuela y familias que necesitan apoyo o recursos en una variedad de formas. Estas podrían ser sesiones individuales con estudiantes con problemas, discusiones en grupos pequeños e instrucción con el grupo completo. 

“Estamos en momentos críticos donde las necesidades socioemocionales son muy importantes para preparar a los estudiantes para el aprendizaje”, dice Lily Zani, directora de estrategias de aprendizaje socioemocional del distrito. “Si no atendemos a sus necesidades, será un desafío para ellos aprender. Nuestra labor es entrar en la saulas para liderar con amor y ser agentes de cambio”.

Además de las afirmaciones positivas en el espejo, otras actividades de SEL (siglas en inglés del aprendizaje socioemocional) incluyen el uso de un rincón relajante donde los estudiantes pueden hacer una pausa y reflexionar sobre su comportamiento y un medidor de estado de ánimo para ayudar a los estudiantes a ser conscientes de sí mismos y comunicar sus sentimientos y emociones.

“Normalicemos todos los sentimientos”, dice la maestra Penzo, quien enseñó durante 13 años y fue nombrada finalista como Maestra del Año del Distrito el año pasado.

Cada escuela del distrito tiene un motivador estudiantil con experiencia en enseñanza y/o trabajo social. Algunos son consejeros o especialistas en comportamiento, la mayoría tiene una maestría. Aunque las estrategias utilizadas por cada uno pueden diferir, el objetivo final es el mismo: servir a toda la comunidad escolar y brindar el apoyo necesario para garantizar el éxito de los estudiantes.

“Espero impactar a los estudiantes de manera positiva enseñándoles habilidades para la vida que los llevarán a ser ciudadanos productivos”, dice la Srita. Penzo. “Quiero que nuestros estudiantes sepan que estoy aquí para amarlos, darles el valor que se merecen y construir relaciones sanas con ellos. Quiero que nuestros maestros y personal se sientan apoyados por la enseñanza conjunta con ellos y proporcionando los recursos/materiales que puedan necesitar para la implementación de SEL en sus aulas. Estoy emocionada de seguir haciendo una diferencia en la vida de nuestros estudiantes y estoy agradecida por la oportunidad de servir como Motivadora Estudiantil ”.

Si cree que su hijo(a) podría beneficiarse del apoyo socioemocional, comuníquese con el motivador estudiantil de la escuela de su hijo(a). También puede seguir el programa en Twitter en @SEL_IISD para ver a estos campeones de la motivación estudiantil en acción.